... Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Mateo 28:19,20

La Divinidad de Cristo 2da parte

{ Por Miguel Cabán }

En cierta ocasión el Señor Jesús le dijo a Tomás: "Acerca aquí tu dedo y mira mis manos; trae tu mano y métela en mi costado, y no seas incrédulo sino creyente. Tomás le contestó: 'Señor mío y Dios mío' (San Juan 20:27, 28), Biblia de Jerusalén).

Los oponentes de la divinidad de Cristo aseveran que Tomás sencillamente usó "una exclamación emocional de asombro, hablada a Jesús". Esto es imposible por la siguiente razón: En nuestra cultura es aceptable usar la exclamación emocional -¡OH mi Dios!- para denotar asombro, pero en la de Tomás era inaceptable en vista de que los judíos tenían mucho cuidado al usar la palabra Señor o Dios.

Según el contexto inmediato ¿a quién le contestó Tomás? Le contestó a Jesús. Ahora cabe preguntar: ¿Qué fue lo que le contestó al Señor Jesús? Le contestó: "¡Señor mío y Dios mío!" Así que Tomás reconoció que Jesús es el Señor y que era parte del único Dios verdadero.

Según las mentes teocráticas de la WatchTower, "para Tomás, Jesús era como 'un dios', especialmente en las circunstancias milagrosas que impulsaron a Tomás a expresarse como lo hizo." (¿Debería creer usted en la Trinidad? pág. 29).

Para Tomás, Jesucristo no era "un dios", si así fuera él hubiera usado la palabra griega Theós sin el artículo, pues según los testigos de Jehová, cuando se habla del Dios Supremo se usa la palabra ho theós. En este texto Tomás le dijo a Cristo "Señor mío y Dios mío" usó el artículo "ho" antes de "Señor mío" y antes de "Dios mío": ho Kirios moy kai ho Theós moy. Quiere decir que Tomás se dirigió a Cristo reconociéndolo como el verdadero Dios.

Si Cristo no hubiese aceptado que él era Dios y Señor él hubiese corregido al discípulo como en otras ocasiones los corrigió cuando expresaban cosas que no estaban en armonía con la doctrina cristiana.

En el libro Ayuda para entender la Biblia, publicado en español en 1987, los testigos de Jehová citan a The imperial Bible Dictionary (vol. 1, pág. 856): "El hebreo puede decir el 'Elohim', el Dios verdadero, en contraste con todos los dioses falsos; pero nunca dice el Jehová, pues Jehová es el nombre únicamente del Dios verdadero. Dice vez tras vez mi Dios...pero nunca mi Jehová, pues cuando dice mi Dios, se refiere a Jehová." (Ayuda para entender la Biblia, pág. 850, publicado en español en 1987).

Si cuando un hebreo dice "mi Dios" se refiere a Jehová, entonces quiere decir que Tomás reconoció que Cristo es Jehová y por lo tanto es Dios.

Para sostener que Cristo no es Dios, los testigos de Jehová presentan la siguiente objeción: "Fuera una cosa o la otra, Tomás no pensaba que Jesús fuera el Dios Todopoderoso, porque él y los demás apóstoles sabían que Jesús nunca había afirmado ser Dios verdadero (Juan 17:3)".

Si hay que excluir al Hijo de la Deidad por el hecho de que Jesús llamó al Padre- "el único Dios verdadero"- ¿cómo explicar las palabras que se registran en Judas 4 donde el Hijo de Dios es llamado "nuestro único dueño y Señor"? (Biblia de los testigos de Jehová).

Si entendemos éstas palabras (Judas 4) en la misma forma que los testigos de Jehová entienden Juan 17:3, entonces quiere decir que Dios el Padre no es nuestro "dueño y Señor" puesto que Judas 4 dice que "nuestro único dueño y Señor" es Jesucristo.

Cuando el Señor Jesucristo llama al Padre el "único Dios verdadero" no excluye, el Hijo ni tampoco el Espíritu Santo de la Deidad. La palabra único no es exclusiva de ninguna de las personas que componen la Deidad. Aquel a quien la Biblia llama "el Dios verdadero" se ha manifestado en tres personas distintas y separadas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo (San Mateo 28:18,19).

E. B. Price, así se expresó cuando comentó el texto de San Juan 17:3: "Un poco de reflexión en este versículo rápidamente revela que este texto no excluye a Jesucristo de ser parte de este 'único Dios verdadero'. El énfasis está en contraste con otros dioses falsos, en los cuales no hay salvación.

Si un conocimiento del verdadero Dios significa vida eterna, entonces Jesucristo debe ser parte de este sólo Dios verdadero porque Hechos 4:12 (NM) dice: 'Además, no hay salvación en ningún otro, porque no hay otro nombre debajo del cielo que se haya dado entre los hombres mediante el cual tengamos que ser salvos'.

"1 Juan 5:13, (NM): 'Les escribo estas cosas para que sepan que tienen vida eterna, ustedes los que ponen su fe en el nombre del Hijo de Dios'.

"El problema que tienen muchas personas con Juan 17:3 es entender como Jesucristo puede ser separado de el único Dios verdadero y todavía ser miembro de ese Dios (o Divinidad). Esto puede ser ilustrado por un telegrama que puede ser dirigido a la Realeza Británica:

'El pueblo de Australia conoce y aprecia a la Familia Real, y a quien usted envió para representar en visita real a Australia, su hijo mayor Carlos.'

"Un hijo es todavía miembro de la familia real, aunque el esté separado de ellos. Además, él es parte de la realeza. De un modo similar, Jesús es todavía miembro de la Divinidad, aunque El estaba separado en este mundo. El era todavía Divino, de la misma naturaleza del padre, El era Dios." (Our Friends: The Jehovah's Witnesses, pág.44, edición de 1989).

Objeción de los testigos de Jehová:

"Sólo tres versículos después de la exclamación de Tomás, en Juan 20:31, la Biblia aclara más este asunto al declarar: 'Estas han sido escritas para que ustedes crean que Jesús es el Cristo el Hijo de Dios', no que fuera el Dios Todopoderoso."

RESPUESTA:

¿Qué significa la expresión "el Hijo de Dios"? Para los testigos de Jehová "el Hijo de Dios" implica que Cristo no es Todopoderoso y que no forma parte de una Deidad siendo un poco inferior al Padre. Pero, para los judíos significaba ser igual al Padre.

En la corte de Caifás, se le dijo a Jesús: "¡Por el Dios vivo te pongo bajo juramento de que nos digas si tú eres el Cristo el Hijo de Dios!" (San Mateo 26:63, Traducción del Nuevo Mundo, 1987).

Ahora veamos lo que Cristo respondió: "Tú mismo lo dijiste" (San Mat. 26:64). Entonces ¿qué dijo el sumo sacerdote? "Ha blasfemado!" (verso 65). Notemos que el Señor Jesús fue acusado de blasfemar porque él se igualó al Padre al decir que era "el Hijo de Dios". Para los judíos eso era considerado como una blasfemia. Además si Jesús no quería decir lo que los judíos entendieron ¿por qué no los corrigió? ¿Por qué? No encontramos ninguna contradicción entre Juan 20:28 -"¡Señor mío y Dios mío!- y Juan 20:31 "Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios".

Los testigos de Jehová aseveran que, la declaración de, Juan 20:27 "Señor mío y Dios mío" no evidencia que Cristo sea Dios por el hecho de que en Juan 20:17 Jesús le dijo a María Magdalena: "Ve a mis hermanos, y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios"

RESPUESTA:

"Fue como un hombre que Jesús nació, creció en edad, en gracia y sabiduría, fue tentado, aprendió obediencia, oró, sintió hambre, cansancio, sed, durmió y finalmente murió; todo esto es razonable ya que tomó la naturaleza completa de aquellos a quienes vino a redimir; si Jesús dijo 'mi Dios' al referirse al Padre fue como hombre, pues también como tal dijo 'mi alma', 'mi espíritu', y pudo decir 'mi cuerpo' siendo o formando todas estas cosas una misma naturaleza. Si dijo en una ocasión 'el Padre es mayor que yo' es porque en su humillación como hombre, como siervo, fue inferior al Padre a quien como tal estuvo subordinado" (Los Testigos de Jehová a la Luz de la Biblia, pág. 148).

Objeción que presentan los testigos de Jehová:

"Isaías 9:6 (VM) también describe a Jesús proféticamente como 'Poderoso Dios', pero no como el Dios Todopoderoso." (Razonamiento...pág. 210).

A este reparo respondemos que si Cristo no es Todopoderoso por el hecho de que en Isaías 9:6 se le llama Poderoso, entonces Jehová Dios tampoco sería Todopoderoso, ya que en Deut. 10:17 se le llama Poderoso.

Si Cristo no es Dios Todopoderoso porque en Isaías 9:6 se le llama Poderoso, ¿por qué en Isaías 10:21 se le llama a Jehová "Dios poderoso"? Si en Isaías 10:21 la palabra poderoso se refiere a Jehová, entonces la misma frase de Isaías 9:6 (Poderoso) no se refiere a un dios inferior, sino a uno igual a Dios: Jesucristo. ¿Y por qué los testigos de Jehová no dicen que en Isaías 9:6 también se describe a Jesús como "Padre eterno"?

Objeción presentada por los Testigos de Jehová:

"Debido a la singularidad de la posición que él ocupa con relación a Jehová, en Juan 1:18 (NM) se llama a Jesús el 'dios unigénito'. (Razonamiento..., pág. 210).

La palabra griega que se traduce como unigénito es monogenés, que quiere decir único en su clase y no unigénito. El diccionario de Lidell y Scott sostiene que se trata del "único miembro de una clase." (Tomo 2, pág. 1,144).

El Diccionario de Moulton y Milligan, traduce así: "El único de una especie. Sólo. Singular." Y el Greek-English Dictionary of New Testament por Barclay M. Newman Jr. dice: "Solo, único."

"A esta altura, dice A.B. Christianini, conviene notar que la Septuaginta -tan del agrado de los testigos- también emplea la palabra monogenés con la equivalencia del adjetivo hebreo 'yachid', que significa 'solitario'. Así está en el Sal. 68:6, VM, por ejemplo. Esto denota que los traductores de la Septuaginta vieron en monogenés el sentido de singular; de ahí el realce que pusieron en 'único', 'sólo', 'uno' (mono), y no en genus."

"Si 'unigénito' quisiera decir tan sólo 'el único engendrado', como insisten los testigos de Jehová, entonces, ¿cómo interpretan el texto de Heb. 11:17, que afirma que Isaac fue el 'unigénito' de Abrahán? Pues la Biblia registra que Abrahán tuvo por lo menos ocho hijos: Ismael, el primero, nacido de Agar; Isaac, nacido de Sara; y seis hijos más nacidos de Cetura (Gén.25:1, 2)."

"Pese a todo, Isaac fue denominado 'unigénito', no por ser el único hijo, el único engendrado, ni por ser el hijo mayor; sino por ser el hijo dilecto, el hijo de la promesa, y por eso Abrahán lo amaba de modo especial." (Radiografía del Jehovismo, pág. 33, 34).

¿Cómo fue -alguien preguntará- qué se introdujo el término unigénito en las versiones del idioma español?

Respecto a esto dice el Comentario Bíblico Adventista del Séptimo Día: "La traducción 'unigénito', aquí y en otras partes, indudablemente se originó con los primeros padres de la Iglesia Católica y entró en las primeras traducciones de la Biblia al castellano por la influencia de La Vulgata latina, texto oficial de la Biblia para la Iglesia Católica. Reflejando con exactitud el griego, varios manuscritos redactados en latín antiguo, anteriores a La Vulgata, dicen 'único' y no 'unigénito'. (Tomo 5, pág. 880, primera edición 1987).

He aquí algunas declaraciones de los testigos de Jehová respecto al asunto que estamos tratando. Ellos afirman: "Además, ¿por qué usa la Biblia la mismísima palabra griega para 'unigénito'...al describir la relación de Isaac con Abrahán? Hebreos 11:17 dice que Isaac era el 'hijo unigénito' de Abrahán. No cabe duda de que, en el caso de Isaac, él era unigénito en el sentido normal, sin ser igual en tiempo ni posición a su Padre." (¿Debería Creer Usted en la Trinidad? pág. 15, último párrafo).

La Verdad

Al Afirmar, los testigos de Jehová, que Isaac "era unigénito en sentido normal" no están diciendo la verdad, pues la Palabra de Dios dice en Gén. 16:15; 25:1,2, que Ismael, fue el primero nacido de Agar. Abrahán tuvo ocho hijos. Por lo tanto Isaac no pudo ser el 'hijo unigénito de Abrahán' en un sentido normal o literal. Sin embargo Isaac fue llamado "unigénito" de Abrahán, en Hebreos 11:17, en sentido que él era hijo de la promesa. Recordemos que Isaac no fue el único hijo engendrado como tampoco fue el hijo mayor.

Declaración de los testigos de Jehová

"Y al Dios Todopoderoso se le puede llamar con razón su Engendrador, o Padre, en el mismo sentido que un Padre terrestre, como Abrahán, engendra un hijo. (Hebreos 11:17.) Por lo tanto, cuando la Biblia dice que Dios es el 'Padre' de Jesús, quiere decir lo que dice..." (¿Debería Creer Usted en la Trinidad? pág. 16, tercer párrafo).

La Verdad

Si nosotros seguimos la misma línea de interpretación de los testigos de Jehová, nos encontraríamos con un problema. Todos los que son engendrados en el sentido normal tienen una madre. ¿Estamos de acuerdo amigos lectores? ¡Claro que sí! Entonces ¿quién fue la madre divina de Jesús (antes de él nacer de la bendita virgen María) si entendemos que Jesús fue engendrado "en el mismo sentido que un padre terrestre"? Este servidor pide a los lectores testigos de Jehová que por favor me envíen el nombre a mi dirección postal.

Declaración de los testigos de Jehová

"Esto estaría en armonía con las palabras que Jesús mismo citó de los Salmos, donde a hombres poderosos, a jueces, se les llamó 'dioses' (Juan 10:34, 35, V V [1977]; Sal. 82:1-6)." (Razonamiento..., pág. 210).

La Verdad

Agradecemos al Pastor David Rodríguez por el siguiente comentario que nos escribiera sobre este particular:

"En el texto de Juan 10:34,35, Jesús evidencia su carácter divino. Al citar Salmos 82:1-7, El no insinuó que su Divinidad fuera igual que la de los jueces del pasado, por el contrario, dijo que si a ellos se les llamó 'Elohim', cuanto más a El.

Los jueces eran considerados 'Elohim' en virtud de que desempeñaban una labor que era prerrogativa divina. En Exodo 7:1 Jehová constituyó 'Elohim ' a Moisés sobre el faraón de Egipto por causa de la función que habría de desempeñar como representante del Dios verdadero.

"En el Salmo 82 se llama 'Elohim' a los jueces, hombres mortales a quienes el pueblo se subordinaba, pero ellos a su vez estaban sometidos al Dios que les dio ese rango. Eran llamados 'Elohim' por causa de su función administrativa en el desempeño de la justicia divina.

"Cuando en Juan 10: 34, 35 Jesús citó el Salmo 82 no implicó en lo más mínimo la idea de que El era Dios en el sentido en que a los jueces se les llamaba 'Elohim', por el contrario, lo hizo en forma contrastante para justificar las declaraciones que había hecho previamente: 'Yo y el Padre una cosa somos' v.30. Es en este contexto que Jesús le dice a los judíos que si les llamaba 'Elohim' por causa de sus funciones, cuanto más a mí que el Padre está en mi y yo en El, v.38.

Obviamente Jesús no era 'Elohim' como lo eran los jueces. Ni el contexto inmediato ni el contexto general de la Biblia apoyan esa idea. Jesús no fue llamado Dios en virtud de su encarnación, más bien se le llamó Hijo de Dios, Juan 3:16. El era Dios antes de encarnarse, por naturaleza y no por funciones de su encarnación, Fil. 2:5-7; Juan 1:1-3.

"En Juan 10:30-38 Jesús mostró que él puede dar vida eterna, y que El y el Padre son una sola cosa. Los judíos entendieron por estas expresiones que El se hacía igual al Dios y Padre. De hecho, lo entendieron bien, pues las profecías del Antiguo Testamento, lo mencionaban como el Dios y Padre eterno, Isaías 9:6. Fíjense que Jesús no los contradijo, justificó el mensaje que claramente ellos habían entendido, a saber, que Jesús era Dios, y cito de manera contrastante el Salmo 82. Si ellos que eran mortales eran llamados 'Elohim' cuanto más Jesús que era el dador de la vida, v.28." (Hasta aquí el pastor Rodríguez).  

Los testigos de Jehová arguyen que "las pruebas llevan a la conclusión de que el título 'Alfa y Omega' aplica al Dios Todopoderoso, el Padre, no al Hijo."

Esta aseveración es completamente falsa, pues en Apocalipsis 22:12-13 "Alfa y Omega" es nada menos que el Señor Jesucristo. Los textos dicen así: "Mira: (dice Cristo) vengo pronto, y el galardón que doy está conmigo, para dar a cada uno según sea su obra. Yo soy el Alfa y la Omega, (dice Cristo), el primero y el último, el principio y el fin." Si en Apocalipsis 1:8 Jehová es "el Alfa y la Omega", quiere decir que Jesús es el Jehová del Antiguo Testamento, ya que en Apocalipsis 22:12-13 Cristo se identifica como "el Alfa y la Omega". Si "el Alfa y la Omega" es el "Todopoderoso", según Apocalipsis 1:8, entonces Cristo es "Todopoderoso".

Refiriéndose a nuestro Señor Jesucristo, dice Juan el teólogo: "Y cuando lo ví, caí como muerto a sus pies. Y puso su mano derecha sobre mí y dijo: 'No tengas temor. Yo soy el PRIMERO Y EL ULTIMO y el viviente; y llegué a estar muerto, pero, ¡mira! vivo para siempre jamás, y tengo las llaves de la muerte y del Hades.' (Apocalipsis 1:17,18. Traducción del Nuevo Mundo, 1961).

Note usted, amigo lector, que el mismo título "EL PRIMERO Y EL ULTIMO" se lo aplica a sí mismo Jehová Dios. El texto reza de la siguiente manera: "Esto es lo que ha dicho Jehová...YO SOY EL PRIMERO Y YO SOY EL ULTIMO..." (Isaías 44:6, Nuevo Mundo). Si Cristo y Jehová son el primero y el último, quiere decir, que hay dos primero y dos últimos. De modo que el Señor Jesucristo reclama para sí, según la evidencia bíblica, los mismos títulos que pertenecen a Jehová Dios.

Los testigos de Jehová tratan de refutar esta verdad con el siguiente argumento: "En el hebreo original, en Isaías 44:6 no hay artículo definido con las palabras 'primero' y 'último', mientras que en la descripción que Jesús da de sí mismo en el griego original en Revelación 1:17 se halla el artículo definido. Por eso, gramaticalmente Revelación 1:17 indica un título, mientras que Isaías 44:6 pinta la divinidad de Jehová." (Apocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación! pág. 27, publicado en 1988, nota de al calce).

 El argumento de que "Revelación 1:17 indica un título, mientras que Isaías 44:6 pinta la divinidad de Jehová" es un invento de los testigos de Jehová. En Apocalipsis 1:17 y 2:8 se halla el artículo definido con las palabras "primero" y "último" (HO PROTOS KAY HO ESCHATOS), pero también es cierto que en Apocalipsis 22:13, el cual los testigos de Jehová lo aplican a Jehová Dios, tiene el artículo definido. Por lo tanto, el argumento de los testigos de Jehová no dice nada. ¡Nada!

"En Revelación 22:13 -dicen los testigos de Jehová- también se dice que Alfa y la Omega es 'el primero y el último', expresión que se aplica a Jesús en Revelación 1:17-18. De modo similar, la expresión 'apóstol' se aplica tanto a Jesucristo como a algunos de sus seguidores. Pero esto no prueba que sean la misma persona, ni que sean de igual rango o nivel."

Este razonamiento -de los testigos de Jehová- no tiene sentido ni lógica, pues la expresión 'apóstol' no es lo mismo que 'el primero y el último'. Además en ningún lugar de la Biblia se le llama a ninguna criatura 'el primero y el último', sino sólo a Jehová y a Jesucristo.

¡Lástima que muchas personas no puedan entender la Palabra de Dios por tener la materia gris controlada por los magnates de la organización de los testigos de Brooklyn!

Por esa razón los testigos de Jehová no se atreven a leer un tratado escrito por un autor católico o protestante. El testigo de Jehová que no investiga, que no piensa no se da cuenta que es un autómata de sus líderes de Brooklyn.

"La verdad puede ser dulce o amarga, pero nunca mala. La mentira puede ser dulce o amarga, pero nunca buena".